El agua que bebemos proviene principalmente de fuentes subterráneas (65% en Francia). El resto se trata de aguas superficiales. A menos que el agua colectada sea ya de una alta calidad, ésta sigue un tratamiento que eliminará todos los contaminantes peligrosos para la salud.
Esta animación sigue paso a paso las etapas sucesivas de este proceso que combina acciones físicas, químicas y biológicas.