Los principales agentes de la erosión litoral son las olas, efectos de las mareas y corrientes marinas. Las masas de agua en movimiento actúan como "parachoques de colisiones" que alteran la roca.
No se debe sobreestimar la importancia de la degradación química de la roca por la espuma (que causa la disolución del material), como es el caso de la roca calcárea.
La forma del litoral depende de un gran número de parámetros. Pueden ser algo como simples playas de arena o de guijarros, o podría tratarse de acantilados que han sido modelados a lo largo de deslizamientos sucesivos de las rocas.